Cuentacuentos

Visto cuentos

Aprovecho el cuento viejo que me manda Lü de Lurdes* para una actividad divertida que consiste en leer un cuento y vestir a su personaje de las ropas y situaciones apropiadas a las visicitudes de la historia.
El programa de presentaciones es un buen aliado pues podemos ir colocando o modificando elementos a los protagonistas a medida que la narración avanza, así lo muestra Dora Alonso en esta presentación.

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Contar el cuento primero, proporcionar posteriormente la presentación y comenzar el trabajo de comprensión y atrezzo individual o, mejor colectivamente. Dependiendo de la habilidad de cada grupo hay dos vías posibles: permitirles una búsqueda libre de imágenes prediseñadas (sobre todo cuando tengamos clara la disponibilidad de imágenes adecuadas que no precisen modificaciones) o bien proporcionar en cada diapositiva varios elementos susceptibles de ser usados para que elijan entre ellos y borren los sobrantes, a modo de los recortables para vestir muñecas.

* Como si fuera una casualidad (y lo es) a los pocos días de publicar esta entrada. Lü me ha mandado un precioso cuento, obtenido en la web del pequeño teatro de los libros, que copiopego encantado:

CUENTO VIEJO

Quiero contarte

un cuento viejo:

Desde la Luna

saltó un conejo.

Tenía una oreja

toda de plata:

bastón de oro,

traje de gala.

Zapatos rojos,

medias de lana,

corbata verde,

calzón de pana.

Como el conejo

perdió el sombrero,

compró una gorra

de terciopelo.

Y al ver a un perro

se asustó tanto,

que pegó un brinco

de este tamaño.

Hasta la Luna

llegó el conejo.

Allí sentado

se ha puesto viejo.

Por eso siempre

los perros ladran

cuando de noche

la Luna pasa.

DORA ALONSO

Este cuento lo ha escrito Carolina, del pequeño teatro de los libros en su web.