El libro perdido
Vamos a elegir libros en la biblioteca del centro. Para ello preparamos unas tarjetas con una breve descripción de alguna de sus características, por ejemplo:
- Busca un libro que trate de…
- Busca un libro cuyo protgonista sea…
- Busca un libro ambientado en…
En clase iremos leyendo las tarjetas y adjudicándolas por elección.
También podemos prepararlas en documentos o en diapositivas ; en este caso podemos enviar cada tarjeta a su destinatario mediante la intranet o, mejor todavía, como imagen dentro de un correo electrónico. La imagen que acompaña a este texto es una diapositiva de power point que, guardada como imagen, se incorporó dentro de un correo electrónico y se envió a un alumno (cada uno recibió la suya, de acuerdo con sus preferencias).
Una vez que hayamos repartido todas, hacemos una visita a la biblioteca y, aunque se arme un poco de revuelo, buscamos el libro cuyas características llevamos escritas en la tarjeta; así nos acostumbramos a tocarlos, abrirlos, mirarlos… Hasta que encontremos el nuestro; los primeros que lo hallen, ayudarán a los demás a encontrar el suyo.
Y, después, a leer.
Y después de leer, a ejercer de críticos literarios.