En alta voz
Leer es una actividad íntima y personal, pero en la escuela y, ¿por qué no?, en casa, puede convertirse en un agradable momento en alta voz. Un texto leído en público requiere entonación, vocalización, pausas… y, por lo tanto, comprensión, de quien lee y de quien escucha.
Es preciso huir de la lectura mecánica e investir el acto de leer en público con la escenografía adecuada. A lo mejor hay que recuperar vocablos en desuso para conferirle mayor prestancia, hablemos de declamar, por ejemplo.
Propondremos aquí algunas técnicas para que declamar textos en el aula se convierta en un acto esperado.